Entre muchas otras razones las décadas del 60 y del 70 ingresaron en la leyenda por su música con intérpretes y canciones que marcaron una época irrepetible.
Nacionales y extranjeros, por igual, dejaron un legado que marcó a no pocas generaciones de quienes fueron jóvenes en aquellos años. Y esta sección es un tributo para todos ellos…
PABLO MILANÉS: PARA EL ARRUMACO...
Nació en la ciudad de Bayamo (provincia de Granma, Cuba) el 24 de febrero de 1943 y es uno de los fundadores de la Nueva Trova Cubana.
En los comienzos de su carrera artística estuvo muy influenciado por la música tradicional de su país.
En 1964 se incorporó al cuarteto "Los Bucaneros", colaborando para sus primeros discos.
Un año más tarde editó "Mis 22 años", considerada por muchos como la piedra fundacional de la Nueva Trova Cubana.
Bajo el influjo del "Primer Encuentro Internacional de la Canción de Protesta”, celebrado en Varadero en 1967, Milanés comenzó a generar canciones de contenido político.
Como compositor transitó diversos estilos. Entre ellos el son cubano y la canción de protesta a finales de los '60.
Un álbum importante en su vida fue el titulado "Querido Pablo", un disco homenaje del que participaron Víctor Manuel, Ana Belén, Luis Eduardo Aute y Mercedes Sosa, entre muchos otros.
De entre sus muchas canciones, son especialmente famosas: "Yolanda", "Yo me quedo" o "Para vivir" que terminaron consagrándolo en toda Latinoamérica.
Actualmente vive junto a su mujer y sus dos hijos en la ciudad gallega de Vigo. Y lo vamos a evocar en uno de sus grandes éxitos que se pedía a gritos --en los '60-- en los boliches de onda a la hora de los lentos: "Para vivir" que nos canta desde el videíto...
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