Sensualidad y elegancia, mezcladas con lágrimas, tristezas y añoranzas, son todas características propias de la denominada canción ciudadana.
Tratar de encontrar una respuesta acerca de su origen, lleva a contradicciones comenzando por el propio significado del vocablo "tango", un ritmo que ya pasó a ser patrimonio del mundo.
Y esta sección es, si se quiere, una suerte de “Tabarís” o de “Chantecler” virtual que esta semana se da el lujo de presentar a…
LUIS FILIPELLI
Nació en el porteño barrio de Barracas el 15 septiembre 1955 y, a los 10 años, ingresó al Coro de Niños del Teatro Colón.
En 1973, con sólo 16, inició su carrera profesional en el programa televisivo "Grandes Valores del Tango" y participó del concurso "La voz tanguera" del que resultó ganador.
A partir de 1974 se presentó en casi todos los boliches porteños.
En el mítico "Caño 14" compartió rubro con Roberto Goyeneche, Atilio Stampone, Rubén Juárez y Héctor Stamponi, entre otros.
En 1978, se consagró en el “Festival internacional de Piriápolis” (Uruguay). Y, al año siguiente, grabó su primer larga duración para el sello discográfico Capitol.
Y hasta llegó a presentarse en el Teatro Colón --en un homenaje a Aníbal Troilo-- junto a la Orquesta de Tango de la Ciudad de Buenos Aires, dirigida por Raúl Garello.
Lo que se dice un "capo" de la canción ciudadana que evoco con uno de sus grandes éxitos: “Los cosos de al lao” que nos canta desde el videíto...
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