Sensualidad y elegancia, mezcladas con tristezas y añoranzas, son todas características propias de la denominada canción ciudadana.
Tratar de encontrar una respuesta acerca de su origen, lleva a contradicciones comenzando por el propio significado del vocablo "tango", un ritmo que ya pasó a ser patrimonio del mundo.
Y esta sección es, si se quiere, una suerte de “Tabarís” o de “Chantecler” virtual que esta semana se da el lujo de presentar a…
OSVALDO PIRO
Nació en la Capital Federal el 1 de enero de 1937 y está reconocido como un singular bandoneonista.
Comenzó sus estudios de bandoneón, a los 10 años, con el profesor Félix Cordisco.
Y, ya a los 11, conformó el trío musical infantil OSMASI (Osvaldo, Mario y Simón).
A los 12 amplió sus estudios con el bandoneonista Domingo Mattio que llegó a ser integrante de la orquesta de Aníbal Troilo.
Estudió armonía con Pedro Rubione y Julio Nistal. Inquieto como era, a los 15, se integró --ya de manera profesional-- a la orquesta de Ricardo Pedevilla.
Un año más tarde se incorporó a la orquesta de Alfredo Gobbi, épocas en que los cantantes eran Jorge Maciel y Carlos Almada.
Con su propia orquesta debutó el 16 de febrero de 1965, en el legendario "Patio de Tango".
Con el sello discográfico "Alanicki" grabó su primer LP que fue presentado por "Pichuco" Troilo en su carácter de padrino musical.
En 1968 se incorporó al sello "Phillips" grabando un LP al que denominó "Osvaldo Piro y su orquesta". Sigue en actividad y lo quiero evocar con un tangazo de aquéllos: "Adiós nonino" que nos interpreta desde el videíto...
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