miércoles, 9 de abril de 2014

INFORMACIÓN CLASIFICADA

Con mi asesor político Pirincho nos conocemos casi desde siempre. Hace años que vive en Vicente López (norte del conurbano bonaerense) y se desempeña como jardinero en Olivos.
Naturalmente tiene acceso a la casona cuyos pasillos guardan no pocos secretos de estado. Pero también, y mientras encumbrados funcionarios aguardan ser llamados caminando por el parque, mi asesor político siempre tiene los oídos atentos y, vía mail, me hace llegar info de alta gama… Por caso la que sigue…

PRONTO VAN A ESTALLAR DOS BOMBAS…

Como todas las tardecitas el amigo deja atrás su casa en Vicente López y pone proa a la city porteña. 
Y me cuenta que, recorriendo el barrio de Tribunales, decidió entrar al legendario bar “La Giralda” de avenida Corrientes 1.453. 
El cafetín, según pudo averiguar, es visitado por políticos, legisladores y, naturalmente, por “bogas” de alta gama.
Se pidió un Mojito y unos canapés de centolla chilena para acompañar ese trago entrañable al que tan afecto era Ernest Hemingway durante su estadía en Cuba.  Lo cierto es que dos de los contertulios --ubicados en una mesa contigua-- eran a todas luces abogados por los expedientes cosidos que habían acomodado en una de las sillas.

Bar "La Giralda"
Según escuchó con su “oreja biónica” los profesionales decidieron intercambiar información que haría ruido… y mucho. El informe de mi asesor político es el que sigue:
# La primera data --que uno de ellos le confidenció al otro en voz muy baja-- es que ya está “todo cocinado” y que el juez de la Corte, Eugenio Zaffaroni, renunciará al supremo tribunal en los primeros días del próximo mes de diciembre. 
La CTA (de Yaski), Hebe de Bonafini (y sus madres), y el Movimiento Evita (de Emilio Pérsico) ya dieron su bendición para que --una vez instalado en el llano-- se incorpore a las huestes kirchneristas.
Según comentó el “boga” la fallida reforma del Código Penal no parece ser un estorbo para los planes de Zaffaroni que, en el 2015, se lanzará de lleno a la política defendiendo la “camiseta K”.

Eugenio Zaffaroni
“La decisión ya está tomada. Cumplo 75 años y ése es el límite que indica la Constitución. Once años fueron suficientes”, fueron las palabras que el profesional que tenía la voz cantante escuchó del propio Zaffaroni.
Y, según la narración, parece que el magistrado está absolutamente convencido de volver a la arena política. Lo que no será una novedad en su vida ya que, en su juventud, fue parte del FREPASO y hasta llegó a ser diputado nacional.
Justamente desde sector, ahora parte del kirchnerismo, lo potencian para una candidatura de 2015 a la jefatura de gobierno porteño. Tomá pa’ vo’. 
# La segunda data que el otro “boga”, tiró sobre la mesa devolviendo gentilezas --“sin anestesia”-- sí que hará ruido.
Parece que un reconocido periodista de “la opo” --qué cada dos por tres edita un libro de esos que hacen temblar los cimientos del kirchnerismo-- está avanzando en el borrador de un nuevo escrito que pondrá contra las cuerdas y al borde del knock out al gobierno.

Triple crimen de Gral. Rodríguez
La trama de este libro --que aún no tiene título-- narra con lujo de detalles, y prueba documental e irrefutable, que parte de los fondos que financiaron la campaña del Frente para la Victoria en el 2007 --que llevó a Cristina a la presidencia y a Julio Cobos como compañero de fórmula-- fueron provistos por el narcotráfico.
Contaba el abogado que la info no es una mera especulación periodística, sino  parte de un expediente que reposa en el escritorio de la jueza María Romilda Servini de Cubría. 
En esas fojas queda de resalto que, al menos en parte, el abundante dinero que financió a Cristina fue aportado por organizaciones narco. Esta data surge de la investigación del circuito que recorrieron algunos de los cheques, --emitidos por la Obra Social Bancaria-- que se transferían a las cuentas de la droguería San Javier y que terminaban siendo cobrados en efectivo por Ibar Esteban Pérez Corradi, acusado de narcotraficante por la DEA que solicitó su extradición a los EE.UU. 

El "Chapo" Guzmán
Un dato no menor: Pérez Corradi fue socio del asesinado Sebastián Forza en el mediático caso de “la efedrina” en la localidad bonaerense de Coronel Rodríguez.
En ese contexto es que aparece un informe de la Unidad de Información Financiera (UIF) del año 2008 que complementa todas las sospechas existentes. 
El informe es lapidario asegurando que, los movimientos financieros, “revisten características sospechosas” que podrían encuadrarse como delito de lavado de dinero.
Esto debe sumarse al informe redactado por la embajada de Estados Unidos --a principios del año 2008-- informando que, parte del dinero para la campaña de Cristina, provino sin duda alguna del tráfico de estupefacientes.
Señala a ese respecto dos fuentes concretas: las FARC de Colombia, vía gestión de Hugo Chávez (el recordado ingreso de la valija de Guido Antonini Wilson estaría en esa línea) y dos cárteles de la droga de México: uno de ellos sería el de Sinaloa, dirigido por el “Chapo” Guzmán.

Douglas Farah
Para redondear esta verdadera bomba --que cuando estalle será como un tsunami para las huestes oficialistas-- el “boga” le señaló a su colega (que lo escuchaba absorto) que una pesquisa que el año pasado llevó a cabo el investigador norteamericano Douglas Farah, de la organización “International Assessment and Strategy Center”, da certezas a la información al señalar: “La campaña de Cristina Kirchner y su partido recibieron casi un tercio de las donaciones de campaña declaradas públicamente --unos U$S 1.500 millones-- de gente vinculada a las empresas farmacéuticas, con rumores de estar afiliadas a carteles. De la investigación surge que los socios argentinos del Cartel de Sinaloa financiaron gran parte de la campaña de CFK, jugando un papel importante en su victoria”.
Lapidario y no necesita ningún otro comentario.

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