Trascendieron su tiempo. Amaron y fueron amadas. También deseadas y admiradas. Tuvieron vidas alucinantes, sus romances dieron que hablar y, algunas de ellas, murieron de manera trágica.
Perduran, aún hoy en la memoria colectiva y esta sección es, si se quiere, una manera de recordarlas y homenajearlas. En la actualización de esta semana levantamos al telón para presentar a...
LA PASIONARIA
Su verdadero nombre fue Dolores Ibárruri Gómez y había nacido en el pueblito de Gallarta (Vizcaya, España) el 9 de diciembre de 1895.
Como dirigente política --en un tiempo donde la actividad le estaba vedada a las mujeres-- se destacó durante la Segunda República Española y en la Guerra Civil. de su país.
Fue una histórica del Partido Comunista de España y, a su incansable lucha política, también intentó generar derechos para las mujeres demostrando que también ellas podían elegir su destino.
En 1910, con problemas económicos en su hogar, se vio obligada a abandonar sus estudios.
Así comenzó a trabajar de costurera y sirvienta.
Se casó por iglesia el 16 de febrero de 1916 con un minero socialista llamado Julián Ruiz Gabiña.
Y, junto a él, tomó la doctrina marxista como herramienta ideológica para luchar a favor de la "liberación de la clase obrera".
En 1918 utilizó por primera vez el seudónimo "Pasionaria" para firmar un artículo --publicado en la prensa obrera-- al que tituló "El minero vizcaíno".
A partir de entonces fue detenida en numerosas ocasiones y, en 1920, participó en la fundación del Partido Comunista Español.
En 1931 se trasladó a Madrid para trabajar en la redacción del periódico "Mundo Obrero".
En 1933 asumió la presidencia de la recién fundada Unión de Mujeres Antifascistas.
Tras divorciarse de su marido, mantuvo una relación amorosa con Francisco Antón, un dirigente del PCE en Madrid, 14 años menor que ella. T
uvo seis hijos: Ester, Rubén, Amagoia, Azucena, Amaya y Eva. En las elecciones de febrero de 1936 fue electa diputada por Asturias.
Tras finalizar la Guerra Civil Española, se exilió en Rusia donde murió su hijo Rubén Ruiz Ibárruri durante los combates por la estación central de Stalingrado.
Sin embargo, y a pesar de sus convicciones, condenó fuertemente a la URSS por la invasión a Checoslovaquia que dio lugar a la denominada "Primavera de Praga" en 1968.
Tras la muerte de Francisco Franco, y el fin de la dictadura militar, regresó a su país el 13 de mayo de 1977.
Fue nuevamente electa diputada por Asturias en las primeras elecciones democráticas tras el franquismo.
Dolores falleció en Madrid el 12 de noviembre de 1989 y fue sepultada en el Cementerio de La Almudena. En junio de 2005, y durante el XVII Congreso del Partido Comunista Español, fue elegida "Presidenta de Honor a Perpetuidad".
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