Trascendieron su tiempo. Amaron y fueron amadas. También deseadas y admiradas. Tuvieron vidas alucinantes, sus romances dieron que hablar y, algunas de ellas, murieron de manera trágica.
Perduran, aún hoy en la memoria colectiva y esta sección es, si se quiere, una manera de recordarlas y homenajearlas. En la actualización de esta semana levantamos al telón para presentar a...
NATHALIE DELON
Su verdadero nombre es Francine Canovas y nació el 1 de agosto de 1941 en la localidad de Qujda (Marruecos) que, por entonces, era un protectorado francés.
Su padre, Luis Canovas, la abandonó cuando era un bebé de 8 meses.
Está considerada como una de las más hermosas mujeres de la irrepetible década del '60.
Había comenzado a ser una actriz popular cuando conoció al actor francés, Alain Delon.
Ëste, por ese entonces, acababa de romper definitivamente con su novia de toda la vida: Romy Scheneider.
Con el actor se casó en 1964 y ya estaba embarazada de su hijo Anthony que nació el 30 de septiembre de ese año en el "Cedar Sinaí", hospital de Los Ángeles (EE UU).
Desde entonces fue Nathalie Delon para todo el mundo que la adoraba por su dulce belleza y su elegancia a la hora de vestirse con las prendas más chic del momento.
Natalie debutó en la pantalla grande protagonizando el mítico film "El silencio de un hombre" (1967) precisamente junto a Delon.
A la pareja el amor le duró poco porque, según comentó el actor en su autobiografía, "llegaron a tener una relación como de hermanos".
Después de 5 años de matrimonio se divorciaron --vaya paradoja-- el día de San Valentín en 1969.
El separación no afectó la popularidad de Nathalie. Por el contrario porque, a partir de ese momento y durante los años '70, se convirtió en una de las mujeres más deseadas de Francia tanto por su talento como actriz como por su estilo personal.
Filmó entre otras: "La sorelle" (en 1969) y "La inglesa romántica" (en 1975).
Está retirada y vive su vida, plácidamente, en su palaciega mansión en las costas de Niza.
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